En los aparcamientos en diagonal y en batería hay que ser prácticos y tener cuidado con los coches de 2 puertas, porque estas son más anchas y nos pueden dejar sin poder entrar o golpear los retrovisores cuando menos, del mismo modo que en los aparcamientos en cordón vigilamos a los TODO TERRENO por si llevan bola de remolque.
En la clase de teórica estudiamos cuál era la señal de estacionamiento y la diferencia que había con la de parada. Lo que no está muy claro es si el conductor de este coche estaba bastante confuso porque ha estacionado donde no se puede y aunque en batería se puede aparcar "de morro", él lo ha tomado de manera demasiado literal.
Y otra cosa que también conviene saber es que existe el llamado freno de estacionamiento que como su nombre indica, sirve para dejar inmovilizado el vehículo cuando el conductor va a salir de él. Se llama también freno de mano, porque se usa tirando de la palanca que hay entre los dos asientos y que mediante un cable se bloquean las dos ruedas traseras.
En las ciudades hay estacionamientos subterráneos que tanto si son de los ayuntamientos como privados hay que pagar, al igual que en la superficie hay calles señalizadas como ZONA AZUL (las líneas que delimitan los estacionamientos son azules y que significa que hay que pagar por fracción de tiempo). Naturalmente los vecinos de esas calles pueden pedir a su ayuntamiento una tarjeta de residente con la ventaja de pagar anualmente.
En otras ciudades en cambio optan por poner ZONA VERDE para residentes, dejando una acera para ellos y otra acera (de pago) para los que están de paso; y en otras que son muy turísticas ponen ZONA NARANJA para facilitar a los turistas que puedan pagar todo el día sin preocuparse del coche.
El conductor de este vehículo tiene habilidad para dar y regalar, tiene ingenio porque aprovecha
un desnivel para crear su aparcamiento, pero
también demuestra que a igual espacio se maniobra mejor y con más precisión yendo marcha atrás.
Yo no sé dónde está tomada la foto, pero eso mismo lo he visto hacer en Palma de Mallorca.
Y por último os recomiendo que cuando estéis dando vueltas y vueltas para dejar el coche, a no ser que lo tengáis muy claro, APUNTAD EL NOMBRE DE LA CALLE Y EL NÚMERO FRENTE AL QUE HABÉIS ESTACIONADO, PORQUE CUANDO VAYÁIS A POR ÉL, SEGURO QUE NO SABÉIS DONDE ESTÁ.
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